Tranquilo y Firme: Fortaleza Silenciosa

Algunos hombres hacen ruido con su fe, pero guardan silencio con su obediencia.


Hoy en día hay demasiados hombres haciendo ruido por Jesús en público pero caminando en orgullo a puerta cerrada. Publican versículos, oran largo en la iglesia, y citan las Escrituras a su esposa e hijos, pero están completamente callados en su devoción privada. Y peor aún, confunden rendimiento con propósito. Ese tipo de hombre no está guiando a nadie.



Mateo 6:1 (NVI), “Cuídense de no hacer sus obras de justicia delante de la gente para llamar la atención. Si lo hacen, su Padre que está en el cielo no les dará ninguna recompensa.”


Si eres esposo o padre, ya estás guiando a alguien. La pregunta es, ¿los estás guiando hacia Cristo o hacia ti mismo?

Esta mañana, en un momento de silencio, me golpeó. Orgullo. Sutil. Arrastrándose. Peligroso. Pensé que ya lo había enterrado, pero ahí estaba, escondido debajo de toda mi actividad cristiana “correcta”.

Hablo mucho sobre liderazgo de siervo. Pastorear. Amar a mi familia. Pero tuve que enfrentar una verdad difícil: hay momentos en que me preocupa más lo que otros piensan sobre mi fe que si realmente estoy caminando con Jesús.

¿Te ha pasado? Oras en voz alta, pero no oras en privado. Enseñas a tus hijos sobre Jesús, pero no has leído tu Biblia por tu cuenta en una semana. Dices que confías en Dios, pero sigues tratando de controlar el resultado. Eso no es liderazgo. Eso es orgullo disfrazado con una camiseta cristiana.

Te voy a decir algo que aprendí a la fuerza: los pastores más fuertes no se exhiben frente al rebaño. Se arrodillan en el campo. En silencio. Fielmente. Y con constancia.

Dios no necesita tu ruido. Quiere tu obediencia.

Cuando Jesús nos advirtió en Mateo 6, no solo hablaba de los fariseos. Hablaba de cada hombre que usa su fe para ser visto, en lugar de escoger la obediencia cuando nadie lo está mirando.

Hermano, si tu justicia es un espectáculo, tu recompensa termina cuando se apagan los aplausos. Pero si tu justicia está arraigada en Jesús, tu recompensa es eterna.

Los Hombres del Pastor no usan halos. Cargamos espadas. Y a veces, el golpe más fuerte que das es en silencio. En medio de la noche. De rodillas. O cuando nadie te ve decir no a la tentación. Cuando sirves a tu esposa sin que te lo reconozcan. Cuando corriges a tus hijos con gracia en vez de ira. Cuando trabajas con integridad aunque nadie te esté observando.

Es en esos momentos cuando el enemigo se pone ruidoso. Porque sabe que la obediencia silenciosa es peligrosa. No puede ser manipulada. No puede ser comprada. No se desmorona cuando llegan las tormentas.

No te estoy diciendo que no hables. Necesitamos hombres de fe valientes. Pero si tu voz es más fuerte que tu obediencia, solo eres ruido. Y el ruido no asusta al infierno. Pero un hombre de Dios, callado y comprometido, caminando en la verdad… eso sí aterra al enemigo.

Así que hoy, me reviso a mí mismo otra vez. No para impresionarte. No para escribir un buen devocional. Sino para asegurarme de que realmente estoy siguiendo a Jesús y no actuando para conseguir aprobación.

Mi desafío para ti: cierra la puerta. Abre tu Biblia. Húzte pequeño. Sé honesto. Pídele a Dios que escudriñe tu corazón, que te muestre el orgullo, las obras vacías, cualquier lugar donde estés intentando parecer justo en lugar de llegar a ser justo.

Y si Él te muestra algo, no lo justifiques. Arrepiéntete. Acéptalo. Y lidera desde ese lugar.

Tu esposa no necesita un actor. Necesita un protector.

Tus hijos no necesitan un predicador. Necesitan un pastor.

Tu familia no necesita ruido. Necesita tu presencia.

El mundo celebrará a los hombres que persiguen el dinero, el poder y la imagen. Pero Dios levanta hombres que caminan por fe, pelean con amor y sirven en silencio.

Así que levanta tu espada. Lidera con fortaleza silenciosa. Y deja que tu obediencia hable más fuerte que tus palabras.


El Valor de “Pastoreo en Acción” de hoy es Obediencia Silenciosa

La obediencia silenciosa fortalece tu papel como líder pastor porque entrena tu corazón para servir sin necesitar aplausos. Afila tu carácter en la oscuridad para que puedas liderar con luz en tu hogar.


Reflexiona / Aplica / Comparte

  1. Reflexiona – ¿En qué parte de tu vida te has preocupado más por cómo luces que por quién eres delante de Dios?
  2. Aplica – ¿Cuál es un área privada en tu vida donde podrías comenzar a caminar en obediencia silenciosa hoy?
  3. Comparte – ¿Cómo puedes modelar esta fortaleza silenciosa a otro hombre en tu vida que esté observando cómo lideras?

Referencia Bíblica (NVI)

Mateo 6:1 — “Cuídense de no hacer sus obras de justicia delante de la gente para llamar la atención. Si lo hacen, su Padre que está en el cielo no les dará ninguna recompensa.”


Oración Personal

Señor, escudriña mi corazón y muéstrame dónde he cambiado obediencia por apariencias. No quiero hacer ruido por Ti y guardar silencio en mi pecado. Quiero caminar en la verdad, aun cuando nadie me vea.


Mi Camino Personal & Invitación

Estas reflexiones entre semana nacen de mi tiempo en la Palabra de Dios. Te invito a unirte a mí y a otros Hombres del Pastor para construir hogares centrados en Cristo—liderando, discipulando y sirviendo como Jesús.
Si estas reflexiones te animan, por favor dale me gusta, compártelas, y difúcelas para que más hombres puedan crecer en su llamado.
Para seguir las lecturas diarias, visita nuestra Lista de Reproducción de Reflexiones en YouTube o suscríbete al canal de YouTube aquí.


#DevocionalCristiano #HombresDeFe #LiderazgoEspiritual #menoftheshepherd


Nota: Este contenido ha sido traducido y doblado utilizando herramientas de inteligencia artificial. Aunque hemos hecho nuestro mejor esfuerzo para asegurar la precisión, pueden existir errores menores en la traducción. Gracias por su comprensión.

 


Discover more from Hombres del Buen Pastor

Subscribe to get the latest posts sent to your email.

Scroll to Top